miércoles, 14 de marzo de 2018

Marlene y ÉL

Hola, soy Marlene y vengo a contarles mi encuentro con ÉL.

ÉL es mi compañero de trabajo, es guapo, atractivo y muy lindo. Tiene novia y hasta donde sé, es un cuero con ella, lo es en general con casi todo el mundo. Es alegre, divertido, tiene una hermosa sonrisa, y siempre creí que cogia bien rico. Y por todo eso fue que me atrajo mucho ÉL.

Yo, una chica bien, de familia conservadora muy apegada al catolicismo, de un buen estatus social y economico, tenia 25 años, con una pareja estable, era nueva en la empresa no cumplía ni el año de estar laborando para ellos.
Se venía la posada Godinez que no es mas que una vil pedota, una pachanga pa'changos.

Y pues para mi fue la excusa perfecta para seducir a ÉL.

Yo nunca habia sentido eso que ÉL me hacía sentir, estaba bien con mi novio, pero todo llego a ser muy monótono y aburrido a pesar de que yo era una chica tranquila muy dentro de mi había una bestia que ni yo conocía. Me habia enterado que se habia peleado y cortado con su novia Y quería sacar ese yo interno con ÉL.

La fiesta ya tenia un ambiente medio pesado, se repente se empezaron a notar las parejitas que nunca me habian pasado por la cabeza, al parecer yo era la única que no sabía Me empezó a entrar un temor de no poder coquetar con ÉL. No seré la mujer mas atractiva como lo eran sus amigas, su novia o algunas de sus ex, pero tengo lo mio.

Empecé a tomar, cosa que no hago habitualmente, y empecé a seducirlo discretamente, lo saque a bailar, le arrimaba mis pequeños pechos mientras bailabamos, acomode su mano en mi espalda, trataba de ser sutil, pero a la vez agresiva, me daba mucha pena con los demas compañeros, pero yo quería que se fijara en mi, siempre me había tratado con mucho respeto, pero veía como coqueteaba con las demas y como se llevaba fuerte con algunas de ellas.

Después de estar un rato juntos fingí andar tomada y le pedí que me llevara a mi casa, ÉL accedió amablemente (mi plan iba a la perfección).

Ibamos en mi carro y ÉL no sabia donde vivia yo, asi que lo iba guiando directo hasta un motel, al llegar se sorprendió, se le veía sacado de onda y me dijo "Marlene, o sea andas peda." Sujete su mano y le dije: "Crees que si anduviera peda te estuviera guiando perfectamente para aca?" Me respondio: "Sabes que te respeto mucho y creo que no estas en las mejores..." lo interrumpí y le dije "Ya se, y hoy no quiero que me trates asi" mientras lleve uno de sus dedos a mi boca y lo lami simulando sexo oral.

Apenas se estacionó afuera de la habitación y me lance sobre ÉL a besar sus deliciosos labios que hacian juego perfecto con los mios, apenas nos estábamos besando y mi corazón no dejaba de latir fuertemente, mi cuerpo reaccionaba como nunca, hasta yo quedaba sorprendida, por fin me lo iba a coger. Tantas veces habia fantaseado con eso y por fin se me iba a cumplir.
Mientras lo besaba mi panty ya estaba empapada y empecé a acariciarlo por encima de su pantalón.

Me detuvo y me advirtió: "Si entramos al cuarto no va a ser de oquis eh." Recuerdo clarito sus plabras como si hubiera sido ayer. Le dije "eso es lo que quiero".

Apenas entramos y fue directo al baño, yo tenia preparados hasta los condones. Salió y yo ya lo esperaba solo portando mis cacheteros obviamente dandole la espalda, sabía que eso le excitaba mucho.

Apenas voltee la mirada y me abrazo por detras, sentí como se iba erectando entre mis nalgas, puse sus manos sobre mis pequeños pechos y mis pezones entre sus dedos, bajé una de sus manos para que sintiera como me tenía.

Mi respiración estaba al mil, me besaba el cuello y ya queria que me la metiera, pensé "Calma Marlene tienes toda la noche para cogertelo como siempre has querido" lo senté en la cama y lo empecé a besar, después deje que me besara los pechos, yo ya estaba muy cachonda y lo empuje a que se acostara a la cama, quité mis cacheteros desabroche sus jeans y me monté sobre ÉL, primero frote con mi vagina su ereccion con su boxer de por medio, estaba vuelto loco, pero yo quería un oral, asi que literalmente me senté en su cara, sujete su cabeza y su cabello y empecé a masturbarme con su lengua, sus labios, su boca en general, estaba muy excitada que hasta sentía como su barba me acariciaba el ano y me gustaba, dejé que me lamiera el ano y me encantó, sin embargo estaba muy concentrada en mi placer, de sentir su lengua en mi clítoris y pedí me metiera un dedo, apenas lo incrustó y ya estaba por estallar en un orgasmo rico y placentero. Grité "Ya voy a acabar", no dejé ni que me respondiera y me vine tan rico, como por un minuto entero jaja, me daba mucha pena haber terminado en su boca, pero a ÉL pareció gustarle.

Apenas terminé me recoste a un costado, quería besarme y a mi me daba asquito probarme en ÉL, pero no podía negarle un beso despues de lo rico que había hecho por mí. Pues nos besamos tan rico que me empezaron las ganas otra vez, su erección se asomaba y aunque siempre me negaba a dar un oral dado que no me gustaba el sabor, aun estaba muy excitada y le devolví el favor. Bajé su boxer empecé a chuparsela no se porque pero me sabía delicioso, empecé a chuparsela con mas ganas y despues sus testículos, nunca habia dado el llamado beso negro, pero ÉL me provocaba tantas cosas que ni yo me explicaba, apenas iba a hacerlo y me detuvo con un "no tan abajo" y me jaló de la nuca para que me la metiera toda en la boca, nunca lo había hecho y si me quiso dar asco, se disculpó,  pero lo callé le dije que si quería. Tenia ganas hasta de que terminara en mi boca queria ser su zorra, su sexo mas placentero, ser su perrita, ser su puta.

Dijo: me vas a hacer terminar. Y empecé a mamarsela mas fuerte y mas rápido, dije "es lo que quiero, nunca me los he comido" se excitó mucho y yo tambien.

De repente sentí como empezó a escurrirse en mi boca, y se la seguí mamando me estaba excitando mucho, me sujetó de la cabeza y me jalaba hacia ÉL, habia terminado en mi boca, ya me habia tragado tantito, pero cuando me volteó a ver solte unos pocos en mis pechos y los empecé a frotar. Nos fuimos a limpiar al baño y yo seguía muy excitada.
Abrió la llave de la regadera se metió a asear, yo me fui a un pequeño sofa que estaba justo en la puerta del baño y me empecé a masturbar viéndolo, me miró asombrado y le dije "no es la primera vez que lo hago pensado en ti" mientras acariciaba mi clitoris, mis labios y mi ano.

Mas tardé en terminar la frase que en lo que se acercó a mí, lamio mis jugos,mi ano y lo detuve, me puse en cuatro sobre la orilla de la cama abrí uno de mis gluteos y me nalgueé solita, le dije "ven y hazme tuya". Tome su erección y la pase por entre mis labios rozando mi clítoris, me moría por sentir como su glande abria mis labios para entrar hasta el fondo de mi ser, me empezó a coger bien fuerte, nunca me habian cogido así, le pedí que me pegara y me nalgueó en repetidas ocaciones, después empezó a tomar confianza y me puso con la cara sobre la cama jalandone de los brazos, me estaba gustando mucho su actitud dominante.
Yo nunca habia tenido sexo anal y podía ser mi oportunidad pero aun así, me daba miedo, sé que lo quería, estaba muy excitada y lo quería con ÉL pero aun así no me animé, me estaba penetrando muy rico por la vagina y no quería que eso terminara jamás.
Mi sexo era siempre tranquilo y normal, misionero y así. Todo era diferente con ÉL.

Me volteó y subió mis piernas a sus hombros, despues me abrió las piernas sujetando mis pies, me estaba dando unas embestidas bien duras pero me estaba entrando toda y me gustaba, le empecé a decir cosas que jamás penser decir al coger, pero todas las porno se me vinieron a la mente que estaba al mil, llegó un momento que lo vi ya muy agitado asi es que me monté sobre ÉL, de espaldas, para que pudiera verme el culito, yo hacia que entrara y saliera despacito y luego rápido, la tenía bien dura y me entraba todita.

Me advirtió que estaba por terminar, le dije que estaba bien que no habia problema, sin embargo quería que terminara yo tambien, asi es que lo senté a la esquina de la cama y me subí a el de frente, estabamos cogiendo hermoso, de frente, me besaba bien rico y me entraba perfecto, estaba estimulando toda mi vagina y rozando rico mi clitoris, apretando mis nalgas y queriendo meterme un dedito, terminé delicioso, sentí que ese orgasmo me duró horas.

Mi ritmo cambió pero ÉL aun no teminaba, yo me sentía tan puta, ÉL me hacia sentir asi y me gustaba, le dije "echamelos donde quieras", asi que me recostó a la orilla de la cama, con mis pies en el suelo, comenzó a empujarme contra la cama, pregunté si quería venirse adentro no habia problema donde ÉL quisiera, como que le dio remordimiento de conciencia y me los echo en toda la espalda, las nalgas, incluso sentí como terminó frotando su pene por fuera de mi ano. Todo fue delicioso con ÉL.

Al final terminó dejándome en mi casa le dije que no era necesario que me llamara. Terminó siendo un caballero, a pesar de que el lunes en la oficina nos tiraron carrilla que me habia cogido jaja pobres ilusos si supieran que el que fui yo el que se lo cogió a ÉL.
Jamás habíamos dicho algo hasta hoy que me animó a contar nuestra historia. FIN.

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